Todas esas pisadas en silencio.

Las propias decisiones son como piedras que adoquinan un camino, el sonido que reproducen al pisarlas en una noche tranquila, rebota contra las casas adelante y contra nosotros.
Somos lo queremos ser aun sin darnos cuenta.
Un viento suave de la noche nos envuelve nuevos, hay olor a lluvia y arriba una delgada medialuna nos revela: algunas estrellas se ven mas brillantes desde afuera de la ciudad. No tan lejos se escucha una canilla mal cerrada o defectuosa.
En nuestro camino los sonidos se nos mezclan, no sabemos que esta afuera y que esta adentro; esta noche dejare que así sea, mejor estar poroso que frió e inexpugnable.
Seré eficaz haciendo lo que es menos productivo...o equivocando el paso una vez mas.

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